Charlie tiene 15 años y se ha quedado solo tras
el suicidio de su mejor amigo. Vive con sus padres, su popular y guapa hermana
y un hermano mayor que es una estrella del fútbol americano y que está a punto
de comenzar la universidad. Su profesor de lengua está convencido de que
Charlie posee una gran capacidad intelectual. Tras conocer a Sam y Patrick
empieza a comprender lo que es ser un adolescente, y comienza un viaje hacia la
madurez que le llevará a recorrer caminos nuevos e inesperados. Con ellos
descubre nueva música, empieza a beber, fumar y coquetear con drogas, cambia de
amigos… ¡Hasta que se convierte en un joven de verdad!

Sinceramente,
pienso que cualquiera, incluso aquellos a los que no le gusta leer, podría
disfrutar de este libro, pues describe sentimientos y situaciones que
seguramente todos hemos vivido.