
Escrito por: Srta. Alicia Alina
Tipo: Reseña. Recomendación.
Entre los números primos hay algunos aún más especiales. Son
aquellos que los matemáticos llaman primos gemelos, pues, aunque permanecen
próximos, entre ellos se interpone siempre un número par. Esta verdad
matemática es la hermosa metáfora que el autor ha escogido para narrar la historia
de Alice y Mattia, dos personas cuyas vidas han quedado condicionadas por las
consecuencias de sendos episodios ocurridos en su niñez. Pese a la fuerte
atracción que los une, la vida erigirá entre ellos barreras invisibles que
pondrán a prueba la solidez de su relación.
La sutileza de los rasgos psicológicos de los personajes, así
como la hondura y complejidad de una historia que suscita en los lectores las
reacciones más variadas, resaltan la admirable madurez literaria de este joven
autor a la hora de asomarse, nada más y nada menos, a la esencia de la soledad.
¿Cómo describir una obra que con tan solo su recuerdo te pone
los pelos de punta? ¿Cómo definir unas letras que te hacen llorar y llorar y te
vuelven loca?Al menos para mi gusto, La soledad de los números primos se fue
convirtiendo poco a poco en una obra de arte, cuyos personajes eran tan reales
que iban a estar ahí cuando dejaras la lectura, que podrías leer con cada uno
de ellos su propia vida.
Una historia de amor, de dos mundos separados pero a la vez
tan iguales que duele. Una historia de la vida real, de lo que ocurre cada día
en todas las esquinas de este mundo, sin sorpresas, sin finales perfectos de
cuentos de hadas ni acciones valerosas. Unos personajes tan redondos que
parecen bolas de billar, tan diferentes, tan complejos y, a la vez, tan locos,
tan diferentes, y sin embargo fáciles de encontrar.La soledad de los números
primos es la vida en sí, cada uno de sus recodos, de sus durezas, y relata el
comienzo de la escalada, cuando aún somos adolescentes, para ir ascendiendo a
velocidad apresurada por los problemas de la adultez.
No puedo decir nada, porque no hay palabras. Un autor
jovencísimo, lleno de talento, que se inicia en las letras a paso fuerte,
desbancando para muchos -para mi gusto, le sobrepasa una barbaridad en nivel de
escritura, trama y madurez- a Federicco Moccia. Sin duda, id corriendo a
comprarla, a pedirla prestada, a la biblioteca...